-
Paisaje cubista de colorido fauvista compuesto a partir de gruesas pinceladas de vivos colores. En él se aprecia un riachuelo y algunas casas que se adivinan entre un frondoso bosque y un fondo de montañas que se define sobre un vibrante cielo de nubes brillantes.
-
-
-
Retrato del obispo Joaquín Hernández y Herrero sentado en digna pose en un imponente butacón y ataviado con muceta, roquete, anillo episcopal en la mano izquierda y cruz pectoral. A su izquierda figura una mesa con tintero y una estantería con libros ligeramente tapada por el gran cortinaje que aparece tras él. Destacan los tonos oscuros y granates que contrastan con la luminosidad de la piel del retratado, así como el detallismo patente en los bordados o en el rostro del obispo, muy personalizado, de frente despejada, gruesa nariz, mirada perdida y arrugas en torno a la boca. Todo el discurso iconográfico nos remite a la grandeza del efigiado que se nos presenta de modo solemne rodeado de atributos referentes a su dignidad y erudición. En la parte inferior una inscripción apunta algunos datos biográficos del personaje: "EL ILLmo. Sr. Dr. Dn. JOAQUIN HERNANDEZ Y HERRERO / NATURAL DE LA VILLA DE ALPUENTE: BENEFICIADO Y VICE-RECTr. DE LOS SS. JOANES DE VALa. CURA DEL SALVADOR / CANONIGO PENITENCº. DE LA METROPOLITANA: VISITADr. GENERAL DEL ARZOBISPADO. ELECTO / OBISPO DE BADAJOZ EN 2. Y PRECONIZADO EN 21 DICIEMB. DE 1863. CONSAGRADO EN 10 ABRIL 1864. / EN 25 SEPTIEMB. 1865 FUE PRECONIZADO OBISPO DE SEGORBE, DE CUYO OBISPADO TOMO POSESn. / EL 29 DE ENERO DE 1866. FALLECIO EN SEGORBE EL 19 DE FEBr. DE 1868."
-
Siguiendo la iconografía de la serie de retratos ubicados en el Paraninfo del Centre Cultural La Nau, de la que formó parte este lienzo, Gadea aparece representado aquí en pie junto a una mesa vestida y ataviado con la vestimenta oficial de rector: toga negra, vuelillos en las mangas y condecoraciones entre las que se distingue la Cruz de Isabel la Católica que le fue concedida en 1882.
-
-
-
-
-
-
-
-
-
-
-
-
-
-
-
-
-
-
-
-
En 1885 José María Moles cedió por legado testamentario a la Universitat su preciosa colección de ediciones de teatro, la cual comprendía también el lujoso mobiliario donde se albergaban los libros y los demás elementos del salón literario donde reunía a los componentes de su tertulia.
Este conjunto de muebles de estilo neogriego en madera de nogal labrada con decoraciones incisas y tallas está compuesto por una gran librería- vitrina de tres cuerpos, con otras dos más pequeñas a juego, decoradas las tres con acroterios en forma de palmetas; una gran tarja de madera ricamente labrada con la inscripción en letras doradas: “Todo por Valencia y para Valencia”, y otras cuatro similares más pequeñas con listas de dramaturgos célebres inscritas con letras de madera dorada. Incluye además una mesa ricamente decorada con tallas de emblemas alegóricos, dos sillones con bustos en relieve de Lope de Vega y Calderón en el respaldo y ocho sillas con emblemas y nombres de autores teatrales, todas con asientos tapizados de cuero negro. Constituyen un valioso e interesante testimonio de mobiliario de época, adaptado a las exigencias temáticas de este peculiar salón literario.